Nuestra madre ha sido probablemente la persona más influyente en nuestras vidas. Es quien nos enseñaba machaconamente qué precauciones tomar, qué cosas estaban bien y qué cosas estaban mal, como comportarnos con los demás… todos tenemos en nuestro subconsciente alguna frase que nuestra madre nos repetía todos los días y que probablemente nosotros repetimos también a nuestros hijos: en mi caso, es sin duda eso de “no comas tanto pan, que luego dejas la cena en el plato…”
¿Alguna vez habéis probado a aplicaros a vosotros mismos o a las personas de vuestro entorno las típicas frases que toda madre (o padre) dice a sus hijos?. Son frases llenas de sentido común, muchas veces tan obvias que perdemos de vista su verdadero significado. Si nos aplicáramos esas frases de madre a nosotros mismos en la oficina, seríamos mucho mejores y más felices en nuestro trabajo. He aquí algunos ejemplos:
Vete a tu habitación y piensa en lo que has hecho.
A quien no han castigado alguna vez con ir al rincón de pensar… ¿no sería estupendo hacer eso en la empresa? No tanto como un castigo sino como una especie de rutina. Parar diez minutos al día, o a la semana, pero parar de verdad, solos en un rincón, para reflexionar sobre lo que hemos hecho en el trabajo, como nos hemos comportado en esa reunión en la que hemos perdido un poco los nervios, como hemos contestado al pobre encargado de hacer el informe de seguimiento de nuestro proyecto cuando nos ha preguntado si habíamos podido avanzar algo más que la semana pasada… que bien nos vendría muchas veces aplicarnos lo del rincón de pensar.
No seas abusón con los niños más pequeños.
Una de las lecciones de vida más importantes, dentro y fuera del trabajo: trata a los demás como te gustaría que te trataran a ti. Todos necesitamos que nos expliquen despacio alguna tarea nueva que tengamos en la oficina, que nuestro jefe nos dedique atención cuando tenemos que contarle algún tema importante para nosotros, pero, ¿hacemos lo mismo cuando nos encontramos en el otro lado? Me temo que no siempre…
Cuida tus modales.
Podemos discutir sobre si es más importante el fondo que las formas, pero sin duda las formas son importantes. Ser amables, preguntar a los compañeros por algún tema personal que sepamos que les preocupa, o simplemente saludar y despedirse al entrar o salir de la oficina con cosas que no cuestan ningún esfuerzo y que todo el mundo agradece.
No te pelees con otros niños
Los conflictos son inevitables: en casa, con los amigos, en el trabajo… debemos aprender a manejar los conflictos. Igual que enseñamos a los pequeños que las riñas no se arreglan a puñetazos, en el trabajo debemos ser conscientes de que las discusiones a voz en grito rara vez solucionan un problema. Se trata de ser constructivo, empático, de entender el punto de vista del otro y buscar una solución satisfactoria para todos, no de liarse a mamporros con él.
No comas tanto pan, que luego dejas la cena en el plato.
Aquí pongo la mía. Vale también lo de “haz los deberes antes de irte a jugar”… y es que qué importante es tener claras las prioridades en el trabajo. Todos los días deberíamos hacer el ejercicio de priorizar lo que tenemos que hacer en el día, de manera que dejemos primero cerrado lo urgente y luego continuemos con lo que podría esperar a otro día. Mamá era sin duda un gran coach de gestión de tiempos y prioridades.
Qué orgullosa estoy de tí
Cuando eras pequeño y tu madre te decía eso, te entraba un subidón de felicidad que te duraba todo el día, ¿verdad? Y ahora, ¿con qué frecuencia reconocemos el trabajo bien hecho de un compañero, o le agradecemos el esfuerzo que ha hecho para terminar su parte a tiempo y que nosotros podamos seguir con nuestra parte? Como comento en otro post, https://balcon40.com/2015/05/22/todos-trabajamos-muy-bien-en-equipo-o-no ese reconocimiento a los demás es muy importante para que los equipos de trabajo funcionen y que por tanto puedan alcanzar los objetivos que se propongan
Nuestras madres derrochaban sabiduría infinita… lástima que a muchos con el paso de los años parece que se les haya olvidado J