Si eres de los que piensas que ya has estudiado bastante y que, con la universidad o con tu MBA años después, ya tuviste bastante… Déjame que te dé un susto.

Todo tu currículum , títulos y experiencia incluido, está dejando de tener valor. Y sí, aunque no busques trabajo,  deberías comenzar a darle vueltas a lo de volver a hincar los codos.

Porque queda muy poco para que seas valorado (dentro y fuera de tu empresa) por tu capacidad para ponerte el mundo por montera y los dedos en el teclado, para ver «qué se cuenta Google» sobre esa novedosa herramienta o sobre esa «moderna» metodología de gestión que empieza a sonar en los corrillos del café.

Debemos mejorar nuestra capacidad de aprendizaje

Porque hoy más que nunca, será tu learnability, ese entender que el aprendizaje debe ser una constante a lo largo de toda la vida, será la única medida de tu valor.

No serás otra cosa que lo que seas capaz de aprender de forma autodidacta, identificando por tu cuenta fuentes e información relevantes, extrayendo conocimiento de uno y mil sitios y aplicándolos en tu contexto… y también «desaprendiendo» para ser capaz de cuestionarse ese hacer las cosas como siempre se han hecho.

Porque el aprendizaje «reglado” en forma de curso, ya no es suficiente.

Afortunadamente, aprender está al alcance de cualquiera. Basta una conexión a internet. Ni siquiera es ya necesario sentarse delante de un ordenador.

He aquí algunas propuestas para ello

Oportunidades de autoformación utilizando Internet

  1. Los blogs. Cada vez hay más profesionales relevantes en todos los campos dedicando su tiempo a escribir entradas en blogs corporativos o personales. Desaprovecharlo sería una pena.
  2. Asistencia a eventos y ferias del sector. Muchos son gratuitos y asistir a ellos permite, no sólo adquirir conocimientos, sino también establecer contactos con la empresa o el profesional que los transmiten. Es el networking, y matas dos pájaros de un tiro.
  3. Casos prácticos. Es muy recomendable escuchar de primera mano en mesas redondas a empresas que comparten su estrategia, cómo la han puesto en práctica y los resultados obtenidos. La posibilidad de plantear cuestiones a los protagonistas o pedirles sugerencias no tiene precio.
  4. Conferencias en streaming. Muchos eventos tradicionales ofrecen ya la opción de la asistencia virtual, que sólo requiere una conexión a Internet. La cantidad de contenidos disponibles y el nivel de los ponentes es asombroso. Puede que te resulte más rollo que ir en persona, pero tienes la ventaja de que puedes conectarte desde cualquier lugar, tu oficina incluida. Explícale a tu jefe qué haces y cómo lo vas a aplicar y seguro que no tienes problema.
  5. MOOC o cursos en línea. Son cursos a distancia, accesibles a través de Internet, a los que se puede apuntar cualquier persona y prácticamente no tienen límite de participantes. Permiten hacer un curso gratis en las mejores universidades como Harvard o Stanford.
  6. Los webinars (vídeo-seminario o videoconferencia online). Todos los días hay miles de sesiones de formación sobre casi cualquier tema que se retransmiten en directo a través de Internet. Con una duración de entre 30 y 90 minutos, pueden ser una forma ágil de explorar una nueva forma resolver una necesidad concreta.
  7. Tutoriales de vídeo. En YouTube es posible encontrar vídeos de ayuda para casi cualquier tema. Los videotutoriales son especialmente prácticos cuando queremos aprender cómo utilizar alguna herramienta o un nuevo software.
  8. Las comunidades de interés. La capacidad de poder unirse desde Linkedin o Facebook a grupos de trabajo permite participar en equipos de “educadores informales”. Puedes escuchar, debatir y compartir experiencias y artículos.

Es incuestionable que el aprendizaje informal y autodidacta se impone como una habilidad profesional crítica en la era digital. La capacidad de reinventarse constantemente es vital si queremos aportar valor en nuestras respectivas empresas.

Ser expertos aprendices así como generosos maestros es el concepto de colaboración que subyace en el nuevo modelo de relación digital.

¿Cuándo te pones un hueco diario en la agenda para dedicarlo a tu formación?

@vcnocito