… y esto, aunque a veces te apetezca, claro está, que a muchos nos gusta provocar de vez en cuando. Pero seguro que a la larga no te viene bien. Hay que ser consciente de quién tiene la sartén por el mango para determinados asuntos.

Hay jefes y jefes, y en mi caso, puedo decir que la mayoría de los que he tenido hasta el momento han sido estupendos: trabajadores brillantes, además de muy buenas personas en el trato que hemos tenido; con algunos he intimado más en lo personal, porque se prestaban a ello, y con otros menos pues no todas las personas somos igual de abiertas en lo que se refiere a trabar amistado con otros en el trabajo; pero en estos casos, lo importante es saber ver el papel que juega tu jefe para ti en la empresa y los beneficios que puede reportarte el hecho de tenerle contento y de que te tenga en buena estima.

Porque si reflexionas un poco y analizas…

¿Quién es la persona que te puede servir de valedor para ascender?¿Quién puede hacer tú día a día confortable, o por el contrario un infierno en la empresa?¿Quién es el encargado de reportar sobre ti a Recursos Humanos en las clasificaciones que se suelen hacer en todas las empresas?¿Quién evalúa tu cumplimiento de objetivos, si es que cobras incentivos por ellos? Seguro que hay una parte muy objetiva en esa evaluación, pero también una subjetiva que se beneficiará si te llevas bien con el jefe, claro está.

Y si todas las respuestas a las preguntas anteriores se concretan en la misma persona, no estoy indicándote que te vuelvas un pelota redomado ni que adoptes una actitud servil con el ínclito. Pero sí que le tengas “contento” y le ahorres cabreos sobre todo.

Dedícate un tiempo a pensar, y analiza que es lo que más le gusta a tu jefe en el trabajo, y a la vez qué es lo que le puedes aportar tú. Cada persona es un mundo, y los jefes son personas también (…aunque algunos a veces no lo parezcan). Y sobre todo, analiza lo contrario: cuáles son las cosas que le molestan o que no tolera, para evitar caer en ellas.

¿Tu jefe es un tío ordenado y puntual? Ocúpate de no llegar nunca tarde a las reuniones, y de presentarle la información muy bien estructurada y limpita. Seguro que lo apreciará.

¿Qué tipo de presentaciones le gustan a tu jefe? ¿Extensas y detalladas? ¿Con la información muy sintetizada? ¿Innovadoras o con un patrón y formas muy clásicas? Además de la calidad del contenido, si cuidas estos aspectos, tu jefe te lo agradecerá profundamente.

¿Cómo lleva tu jefe las relaciones con otros departamentos?¿Le gusta que la información fluya de un modo muy jerárquico, o por el contrario prefiere que te busques la vida directamente y ni le copies en los correos aunque tengas que dirigirte a sus pares o superiores en otras áreas? Hay jefes que no soportan que te muevas por tu cuenta, y otros que por el contrario lo único que quieren es saber de ti si te has encontrado con un bloqueo o similar…. Prefieren que pidas perdón a que estés constantemente pidiendo permiso.

En fin, que todos estos aspectos de tu jefe son un amplio caso de análisis, y deberías dedicarte un tiempo a observar. Aprende tanto de sus reacciones contigo como de sus reacciones con otros compañeros, pares y superiores. En la mayoría de los casos, las personas somos bastante predecibles en muchas situaciones, y conocer las reacciones de tu jefe puede reportarte muchos beneficios. Pero sobre todo, lo que puede es ahorrarte muchos, muchos disgustos.