Dicen que hay un empleado ideal para cada tipo de jefe. Yo más bien creo que cada uno de nosotros haría bien «contextualizando» su manera de trabajar para adaptarse al tipo de jefe que le toca en suerte.
Porque al fin y al cabo, estás en un equipo para aportar valor. Y no hay mejor manera de hacerlo que orientar tu trabajo para sintonizarlo en formas con el modo en que quien las va a juzgar las valora.
Algunos dirán que es venderse, yo simplemente creo que es más válido que nunca el dicho de «donde fueres, haz lo que vieres». Dentro de un orden claro, sin renunciar a tus valores…
Pero, ¿no es buena cosa «aliñar» tu yo con la salsa que tu jefe espera ver en ti? ¿Qué opináis?
BALCÓN40 